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La muerte es un país verde
Prólogo de Héctor Abad FaciolinceTomás Vargas Osorio
Una compasión honda arropa a los personajes de estos cuentos. A los miserables, que sufren hambre, enfermedad y muerte; a los explotados y los emigrantes, marcados por la injusticia; a las mujeres rotas, las niñas solas y los pobres viejos cuyo mundo ya fue.
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El rostro tocado por la pena
Traducción y prólogo de Solène DelrieuGisèle Prassinos
Essentielle acaba de casarse por poderes con un hombre al que hace tiempo implantaron un cerebro mecánico. Él dedica su vida a la investigación científica y ella se aburre mortalmente.
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Leer los cuentos del escritor argentino Eduardo L. Holmberg es reencontrarse con algunos de los géneros narrativos preferidos por los lectores de hoy: el fantástico, el policíaco y la ciencia ficción.
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La mancha del alma
Prólogo de Iban ZalduaAlfonso Hernández Catá
No se puede alcanzar el éxito sin la traición. O al menos eso creen los personajes de Hernández Catá: un artista que abandona a su musa por la fama, un soldado que deshonra a su patria por dinero, un eremita que comete el peor pecado por su salvación.
Novedades 2023
Presentamos las novedades 2023 de Libros de la Ballena:
Tomás Vargas Osorio: La muerte es un país verde.
Una compasión honda arropa a los personajes de estos cuentos. A los miserables, que sufren hambre, enfermedad y muerte; a los explotados y los emigrantes, marcados por la injusticia; a las mujeres rotas, las niñas solas y los pobres viejos cuyo mundo ya fue. Pero esa cercanía, esa intimidad del narrador con sus protagonistas, se llena también de naturaleza fértil, de maternidad gozosa y del placer de la carne y los sentidos.
«En estas tierras, que no son los amenos valles paradisiacos de la alta montaña, los lectores nos adentramos en el corazón de las tinieblas y por momentos pasamos de Thomas Mann a Joseph Conrad». Del prólogo de Héctor Abad Faciolince.
Gisèle Prassinos: El rostro tocado por la pena.
Essentielle acaba de casarse por poderes con un hombre al que hace tiempo implantaron un cerebro mecánico. Él dedica su vida a la investigación científica y ella se aburre mortalmente. Cuando las huidas de la imaginación dejan de aportarle consuelo, la joven planea una escapada real, pero el marido adivina sus intenciones y su mente metálica, incapaz de procesar sentimientos, sufre una aparatosa avería. Entonces Essentielle, arrepentida por las consecuencias de su plan, se propone, cueste lo que cueste, devolver al erudito la alegría del conocimiento: el viaje no ha hecho más que empezar.
«El estilo de Gisèle Prassinos es único, todos los poetas la envidian». André Breton.
Eduardo L. Holmberg: ¡Umbra! Y otros cuentos imposibles.
Leer los cuentos del escritor argentino Eduardo L. Holmberg es reencontrarse con algunos de los géneros narrativos preferidos por los lectores de hoy: el fantástico, el policíaco y la ciencia ficción. Pionero de los tres, es sin embargo capaz de reírse de sus extrañas creaciones. En esa burla hay una ambición muy actual: la necesidad de romper sus propias reglas.
«Estos relatos tienen todo su pasado por detrás pero mantienen también todo su futuro por delante. Es decir, pueden leerse como algo que nunca sucedió o como algo que aún no ha sucedido». Rodrigo Fresán.
Alfonso Hernández Catá: La mancha del alma.
No se puede alcanzar el éxito sin la traición. O al menos eso creen los personajes de Hernández Catá: un artista que abandona a su musa por la fama, un soldado que deshonra a su patria por dinero, un eremita que comete el peor pecado por su salvación. Pero todo triunfo sostenido en deslealtad pronto se revela como la mancha del alma, como una agresión contra uno mismo. Y se convierte, por tanto, en un fracaso estrepitoso.
«Al expresar a Alfonso Hernández Catá las gracias por su vida y por su obra, sé que soy el intérprete de millares y millares de seres que se encontraron con él en sus libros». Stefan Zweig.